juan guillermo blanco torres

Muy malos los libretos, escenas poco convincentes como por ejemplo la actriz herida en la pierna y corriendo como si nada, largos trayectos, capitán de policía con un tiro cerca del corazón, al menos un dolorcito en la costilla y levanta la tapa de donde lo tiraron sin dolor alguno. Cuando lo arrojan al ácido se nota que no lanzan algo pesado y ese paquete debía pesar al menos 100 Kgs, hubiese requerido al menos un arrastre y algo de dificultad, el ácido no le hace ni cosquillas, después de un balazo en el pecho y una caída de al menos 2 metros, pudo caminar trayecto largo, pudo volver a levantar el brazo para disparar y al hacer el disparo al delincuente, no revisa si el disparo fue contundente, eso solo le puede pasar a un civil, ni si quiera a un principiante de la policía, el miedo de ser herido y la molestia con el delincuente lo hubiese hecho hasta patearlo. La hija Willis herida , se enfrenta una y otra vez a un tipo que al menos le lleva 30 kilogramos de más, con músculos hasta para romperle un brazo a la actriz y lo asegura fácil, hubiesen buscado los libretistas una manera más convincente para sorprenderlo sin necesidad de contacto, les faltó recurso o crear cualquier cosa más convincente, eso solo pasa en una película de medio pelo. ¿Donde estaban los asesores del director, ¿comiendo donas?. Que pérdida de tiempo. En momentos críticos de la película se dan el tiempo para hablar como si nada, ni si quiera la actuación es acordé con los momentos. Esto parece una película dirigida por un niño contando sus mentiras muy ajenas a la realidad. La verdad no sé si era una burla a las películas de acción o un intento barato por hacer una película. Tengo pena ajena por los actores que les tocó trabajar con esos guiones.