En la descripción del libro no especifica los cristianos que realmente se basan en la Biblia, y en este tipo de perspectiva se puede evidenciar el nombramiento de religiones que hicieron y hacen horribles cosas en nombre de Dios; más no siendo el verdadero cristianismo que no sigue fabulas fantasiosas, si no pruebas verídicas, científicas y muchos testigos oculares del poder de Dios. También en Génesis 11:2-3 encontramos que Moisés escribe con precisión una época de siglos atrás del momento en que lo escribió (Mesopotamia), que no era su tierra dónde se construía con ladrillo y asfalto en contraste de la construcción en piedra de Egipto y Canaán demostrando la veracidad histórica de la Biblia. Esta ha sido muy perseguida durante la historia, más su supervivencia ha sido implacable; y el cumplimiento de sus profecías inigualable.