Una mona vestida de seda. Pretenciosa visualmente. A la elección estética no le encuentro justificación, a menos que se trate de la tontera de "lo ficticio de la sociedad" vs. "la tierra y el campo es lo real", facilón. En la novela aparece fuertemente el campo y en la pelÃcula se encierran entre cartones el 90% del tiempo. Imposible hacer empatÃa con los personajes, terminaron por importarme un rábano. Demasiado foco en el personaje de Anna, que me termina pareciendo una calentona con cara de asco, despreciable. Muy aburrida pelÃcula.