United Colors of Benetton con refrito de orientaciones sexuales a la carta para satisfacer a todos. Últimamente todas las series son como una canción de regueton: ensamblan una y otra vez los mismos ingredientes para conseguir productos desalmados. La serie me iba gustando hasta que me meten con calzador esos ingredientes de una forma tan burda que me quitan las ganas de continuar. En fin, una más.