La serie explora y combina varios conceptos que hacen una buena historia: una trama profunda, lograr empatizar con el protagonista y también un buen antagonista, que tiene momentos en los que también logras empatizar y momentos en el que lo odias. Fuera de eso, está serie combina una temática algo infantil y colorida con un conflicto que va desde las guerras territoriales y conflictos polÃticos, juntando todo con un género Space opera con un toque de humor que te podrÃa sacar por lo menos una ligera pero satisfactoria sonrisa.
Nos cuentan la historia de alguien que trata de ignorar toda profecÃa ya hecha y nos enseña que solo nosotros decidimos nuestro destino, modernizando o alterando un poco el concepto del "camino del héroe", digo yo.
Es una serie realmente sorprendente y, en cierto punto, me trajo un poco de nostalgia; no por el hecho de que haya estado familiarizado con esta franquicia en el pasado, sino por que nos recuerda que aún se pueden hacer grandes historias y que las más grandes odiseas animadas (si las puedo llamar de esa forma) pueden obtener inspiración de todos lados para darnos algo nuevo.