A partir de los diez minutos de pelÃcula es una sucesión de hechos inverosÃmiles que nos llevan todo el tiempo a preguntarnos ¿quién se puede creer esto?. Hay algunas buenas escenas de persecución y choques, pero todo en un marco donde abunda el sinsentido. Imposible mantener el suspenso cuando todo carece de sentido. Una pérdida de tiempo total, que no vale la pena verla ni un domingo de lluvia.