Particularmente, me encantó la pelÃcula, logré entrar rápidamente en sintonÃa con los personajes y también fue de mi agrado que el filme se da tiempo para construirlos y darle un trasfondo a cada uno de ellos, mostrándonos sus más puros deseos, pero también sus frustraciones, tan cotidianas y excelsamente ejecutadas que te hacen sentir parte de esta bella historia.
Creo que todos en algún punto de nuestra vida nos hemos sentido como Flama, Moko o Rita, inclusive como Ulises, llenos de deseos y resignados a vivir una vida con la que no estamos del todo conformes, dejando de lado nuestras pasiones y yendo en contra de nuestros principios para poder sobrevivir, pues como bien menciona Ulises: "Las oportunidades en la vida son como los tiros que tiene una escopeta", los cuales, muchos de nosotros ya nos gastamos.
Realmente admiro a Fernando Eimbcke por convertir un domingo, aparentemente aburrido, en una historia reflexiva y llena de momentos divertidos la cual, personalmente, disfruté mucho y el tiempo se me fue volando.