Karen Romero López

Es sin duda alguna un libro iniciático, si bien es una fábula, podemos creer que somos Juan Salvador Gaviota, y que nuestro propósito en la Vida es crecer saliéndose del núcleo para ser autodidactas hasta llegar a la muerte y descubrir que solo es otro nacimiento en el que por fin encajamos con otros seres similares, y vuelve a comenzar el aprendizaje, hasta que un día volvemos a este mismo mundo pero ya como maestros, todo porque si tenemos una característica natural, es porque la naturaleza no se equivoca y podemos sacar de ella todo el máximo provecho. Este fue mi primer libro leído a consciencia, lo leí a los 7 años de edad y marco toda mi Vida, como les digo, me creí Juan Salvador Gaviota y quise apropiarme del hecho de que si no encajo en la sociedad o en la familia, no importa porque puedo pensar, y eso me diferencia del resto de seres vivos, puedo reflexionar, puedo aprender, y ese concepto me llevo a salir del rol de cumplir y pasar al vivir mi Vida tal como es, mía y de nadie más. Es un buen libro, si no lo ha leído, léalo, si ya lo leyó recomiéndelo, si tiene un niño de 7 años a quien regalárselo, no lo dude, le da el mejor libro de superación personal.