a diferencia de otros años en donde me parecÃa una opción de diversión superficial pero éticamente válida y relacionada con lo popular, que me hacÃa sentir conectado con quienes me rodeaban... hoy siento que a pesar de un elenco amplio (amo a Romina Ricci por ejemplo, que merece un espacio de exhibición) es un esbozo desdibujado adonde no encuentro ninguna identificación en lo que propone. La actitud negacionista de la pandemia generó que no sea ni siquiera un programa para tener de fondo mientras cocino.