PelÃcula injustamente valorada. Con un bajÃsimo presupuesto tiene una estética heredera de Blade Runner muy armoniosa e incluso en ocasiones preciosista. Su pecado, y para un servidor, su excelencia y virtud es priorizar los diálogos y el ritmo lento a lo teatral en lugar de la metralleta de acción que contamina el cine de estos tiempos. NO TE LA PIERDAS, VALORALA POR TI MISMO.