No es fiel al dibujo original, solo referencias sutiles. Las canciones conocidas fueron reemplazadas por tenues melodias, retiraron al personaje más memorable y amado por todos, el dragón Mushu, sustituido por un ave fénix sin diálogo con solo forma de guÃa espiritual, arruinando la nostalgia con una historia de acción algo aburrida casi sin comedia.