los duelos duran lo que tardamos en aceptar la pérdida, la tristeza es parte natural del proceso del duelo, y, como parte natural, debemos aceptarla, dejar de resistirnos, nuestra vida no se puede convertir en la casa de Bernarda Alba, no hay nada más sano que aprender a estar en soledad, estar a gusto con una misma, cuanto antes disfrutemos de nuestra compañía, mejor, porque para bien o para mal es para toda la vida.