Comencé a leer el libro con mucha calma, pensando que así podría tenerlo en mis manos por más tiempo. Lamentablemente bastó leer el primer capitulo para no parar hasta terminarlo.
Una novela que entretiene y atrapa no solo por los casos que entrelazados, llenos de detalles y vértices que hacen plantear una teoría tras otra, sino también el desarrollo de los personajes-tanto los protagonistas, como los secundarios-que muestran distintas personalidades en mayor o menor complejidad y puntos de vista que te otorgan interesantes momentos de reflexión. Una persona, un mundo. Un gran caso por resolver. Es lo que consigue J.k. Rowling de manera magistral tanto en este libro como en todos los anteriores de la serie de Cormoran Strike y Robin Ellacott. Ahora no me queda más que esperar el siguiente.