La injusticia e hipocresÃa religiosa y polÃtica mauritana conspiran contra una de tantas familias mauritanas, plasma a la perfección el sufrimiento que padecen la población de este territorio gracias a una guerra religiosa, donde pese a jugar un rol neutro, se ven enlazados en ella y afectados por la intolerancia hacia las demás creencias o ramas de las mismas.