Porque no se puede menos...
Llena de lugares comunes, malas actuaciones y una historia que no tiene nada de original: es una ensalada incomible.
Incluso las referencias polÃticas y las crÃticas "mordaces" no agregan. Preferible mil veces escuchar las canciones de Oscar Chávez.
Luis Estrada tiene mucho mejores pelÃculas (La ley de Herodes, La dictadura Perfecta...) Aquà no se que pasó.