Es un libro de fácil lectura, es a ratos divertido y a ratos tedioso. La trama es muy simple. Creo que lo más terrible es la normalización de las explosiones de ira de los hombres, el acoso a las mujeres, donde las víctimas o aceptan el acoso o lo rechazan perdiendo puesto laboral y el victimario se olvida.
Creo que ese retrato de los victimarios es pobre y desafortunado