Una de las mejores pelÃculas de todos los tiempos sobre la maldad extrema que se ejerce desde la frialdad de los despachos. El elenco es impresionante, del primero al último. Por destacar alguno, Stanley Tucci, que demuestra la manera de robar un plano con un gesto imperceptible. Supongo que como americano se divirtió merendándose a Brannagh y Firth, que ya es decir. Una pelÃcula que hay que revisar de vez en cuando.