Amaba la serie, estaba (literalmente) obsesionada con ella, me hacÃa reÃr y era muy fácil identificarte con los personajes al igual que tomarles cariño. La última temporada simplemente no debió existir. Todo se sintió incómodo y forzado, arruinaron y desaprovecharon por completo a los personajes. Ahora no podré ver nunca más las anteriores (que sà eran buenas y mantenÃan su esencia), sin sentirme rara.