El contexto histórico merece un respeto pues hay un gran trabajo detrás.
La historia ñoña, previsible, propia de la novela rosa más empalagosa.
Sobra la mitad del libro por la extensión de las descripciones, sobre todo de los momentos amorosos y familiares.
No se como he sido capaz de terminarlo.
Si esta es la literatura premiada por el premio planeta, no miran la calidad sino la posibilidad de hacer caja...
Y lo digo con respeto hacia la escritora que no cabe duda que ha trabajado mucho en la parte histórica