A la medida que iba leyendo, me llenaba de esperanza que mis sueños se podían hacer realidad. Fortaleció mi motivación. Demostremos que con la ayuda de Dios y sobre todo con el esfuerzo y dedicación todo se puede. Arriesguémonos y afrontemos a la sociedad. La vida sigue su camino y hay que darle sentido, así como Daniel delfín.